viernes, 14 de marzo de 2014

Retorno de Pisa-Florencia

Después de pasar una mala noche (acompañada de una repugnante cena congelada), nos hemos levantado algo enfadadas con los pequeños detalles que nos ha ofrecido el hotel. Para empezar, hacía algunos días que no teníamos wifi y nuestros vecinos no paraban de hacer ruido. Por suerte, ese iba a ser el último día y yo me encargué de dejar una nota de "agradecimiento" al dueño del B&B.

Nuestro autobús no salía hasta las 12:10, así que, tal como habíamos planeado, fuimos al centro y compramos los últimos recuerdos y el último helado del viaje (como no, volví a repetir sabores...). Mientras esperábamos la salida del autobús, nos hemos quedado sentadas disfrutando del buen tiempo y leyendo nuestros ebooks.

Una vez en el aeropuerto y antes de coger el avión, nos hemos quedado allí a comer donde la comida era pasable.

En general, a pesar de las cosas malas (como la comida), el viaje me pareció fantástico y me encantó pasar unos días con mi Jud.

miércoles, 12 de marzo de 2014

¡Pisa!

Hoy hemos ido a Pisa. Teniendo en cuenta que de Florencia a Pisa hay una hora en tren, hemos intentado levantarnos algo más temprano y así aprovechar más el día. Más o menos lo hemos conseguido, hemos desayunado "rápido" y nos hemos dirigido hasta la estación de trenes, que se encuentra justo en el centro de Florencia. Después de comprar los billetes de tren, con un poco de follón para descubrir como funcionaban las máquinas que los expendían, hemos paseado por la larga estación hasta dar con nuestra vía, que obviamente, era la que más alejada se encontraba de nosotras.



Al llegar a Pisa hemos ido directas a la zona donde se encuentra la torre gracias a un bus que nos ha llevado hasta ahí. Después de mucho dudar por el precio que cuesta (18€!) hemos decidido subir a la Torre de Pisa. Es algo único, que no volveremos a hacer y quien sabe cuanto tiempo más va a estar abierta la torre para poder subir. Hace un tiempo creo recordar que la cerraron por miedo a desprendimientos. Así que había que aprovechar y la verdad es que no me arrepiento de ello. Lo he pasado muy mal tanto subiéndola como bajándola (bajar es aun peor que subir) por miedo a resbalar y caer rodando... Pero por lo demás, increible. Se nota mucho que estás inclinado, y las vistas desde arriba son espectaculares. Hemos hecho ub montón de fotos desde arriba y hemos pasado un muy agradable rato ahí. 





Después de eso ha sido el turno de las 1000 fotos típicas con la torre, aguantándola, tirándola, cogiéndola... Y los muchos intentos para que quedara bien. 


Cuando hemos terminado de comer y revisar algunas paraditas turísticas, hemos vuelto a Florencia, intentando llegar a tiempo para ver la puesta de sol desde el mirador, que dicen que es precioso y muy romántico pero ya eran las 6 cuando el tren nos ha dejado en Florencia y al cabo de nada ya era oscuro, así que al final nos hemos quedado sin puestas de sol, pero hemos aprovechado para hacer un helado riquísimo en un sitio que pese a que a ele-chan le daba mal rollo por la gente que había (hombres que intentaron ligar con nosotras) no estuvo tan mal.



La cena de esta noche tampoco ha sido gran cosa. Comida congelada apta para microondas y fruta. 

Ahora solo nos falta hacer la maleta para mañana... Esto ya se termina. Por la mañana la compra de los últimos detalles y... Volvemos a casa...

martes, 11 de marzo de 2014

¡Florencia!

Hoy, una vez descansadas, nos hemos dirigido a visitar la ciudad de Florencia. El centro histórico de la ciudad es magnifico gracias a su maravillosa arquitectura y su cantidad de museos (los cuales decidimos no visitar a pesar de ser conscientes de que eran muy interesantes).

 

Nuestro primer destino ha sido el Duomo (o la Catedral de Santa María del Fiore), donde destaca la cúpula. Pensábamos que no nos dejarían entrar dentro porque habían unos guardias en la entrada. Intentamos entrar por otro lugar, pero era para acceder a una zona pagando (cosa que nos obligó a retroceder). Finalmente, decidimos volver más tarde, visitando otros lugares.


A continuación nos hemos dirigido hacia la Piazza della Repubblica y al Palazzo Strozzi. De esta forma, casi vimos toda la parte del centro histórico de Florencia antes de comer. Así que, después de hacernos la foto con el cerdo de Florencia, nos hemos ido a comer con la calma.

 

Acto seguido, nos hemos ido hacia la Piazza della Signiora y el Palazzo Vecchio, donde había una réplica de la estatua de David de Miguel Ángel, entre otras impresionantes esculturas (como la de Poseidón).


Después nos hemos dirigido hacia el Ponte Vecchio y al Palazzo Pitti (donde un chico se ha estampado contra el suelo). Hemos descansado un poco, sentándonos en el suelo, antes de regresar al centro de la ciudad y tomarnos un helado.

Finalmente, y para acabar el día, hemos comprado en el McDonald's nuestra cena y decidimos regresar al hotel para comer con la calma (y con asco, porque las patatas fritas frías están malísimas).

lunes, 10 de marzo de 2014

¡Llegamos a Florencia!

Hemos estado un tiempo desaparecidas, pero eso no quiere decir que no hayamos estado en contacto la una con la otra, al contrario. Pero la verdad es que hacía ya un tiempo que no teníamos un viajecito a solas de estos que a nosotras nos gustan: madrugar, andar, no tener horario para comer y disfrutar, sobretodo, disfrutar. Desde inicio de año que venimos hablando que queremos ir a algún lugar juntas, viajar antes de que este verano mi Ele-chan se vaya a pasar un año entero en Japón para terminar su máster, así que se puede decir que para nosotras es como un poco un viaje de despedida. Esta vez, nuestro destino ha sido ir a Italia para ver Pisa y Florencia y... ¡aquí empieza nuestro viaje!

Después de solo dormir un par de horas la noche de ayer a hoy, Ele-chan ha pasado a buscarme a las 5.15 de la madrugada, ¡horrible! 

Al cabo de un rato ya estábamos en el aeropuerto, esperando por nuestro avión y emocionadas con el viaje que justo hoy empezaba. Personalmente, quería dormir en el avión, pero al final me ha sido imposible y eso que Ele-chan si que ha podido *envidia* pero bueno... 


Al llegar al aeropuerto de Pisa tengo que decir que cambiamos los planes. Nuestros planes iniciales eran ir con las maletas hasta Pisa donde guardar la maleta en algún lado. Visitar la torre de Pisa, los alrededores, comer por ahí y luego ya ir hacia Florencia, al hotel y descansar y así tener los siguientes días para la ciudad que más tiene por ver. Pero en el aeropuerto hemos visto un bus que iba directo hasta Florencia así que, sin pensarlo dos veces hemos cogido ese autobús y en poco más de una hora nos hemos plantado en Firenze! 

Ahí lo primero ha sido comer en el Burger King, yendo cargadas com maletas y con hambre no estabamos para dar vueltas, y después ya hemos ido en busca y captura del hotel. Por suerte, y gracias a un autobús carísimo (ir en bus vale 2€ cada viaje) hemos llegado bastante rápido, además que el bus llega hasta el hotel casi. 

Ya instaladas en el hotel hemos descansado un poco, estabamos muertas y pese a lo que nos ha costado, hemos dado un rodeo por el barrio. Paseando hemos ido a ver el centro comercial de al lado del hotel, hemos recorrido parte del río en busca de una tienda de comics que encontró ele-chan por inet y que al llegar estaba cerrada. Que rabia nos ha dado, hemos tenido que volver al hotel y hasta la tarde nada! 


Pero de esta manera por la tarde hemos salido, hemos ido hasta ahí y hemos comprado alguna cosita cada una. 

Al volver ya no hemos hecho mucho más, cansadas pero con hambre hemos ido a las 7.30 a cenar a un japonés que el del hotel nos recomendó pero... ¡Que malo estaba todo! Se notaba que la comida no estaba hecha al momento, sino que llevaba ya joras hecha. El sushi duro y sin casi sabor, la comida recalentada y encima todavía fría, todo lo del wok daba un poco de mala pinta... Lo único que se salvaba ha sido el helado de fresa que etaba imcreíble y que hemos aprovechado para comer un montón de él. Con el precio que nos han clavado, era lo mínimo.


De vuelta al hotel, ya a las 10, hemos decidido ponernos comodas, ducharnos y descansar mientras planeamos el día de mañana. Y aquí estoy, mientras ele-chan está duchándose, yo escribo para evitar caer dormida ahora mismo. ¡Y aún nos queda organizar lo de mañana!